Capítulo 11|Examinar y moderar los deseos del corazón
1.Hijo, todavía debes aprender muchas cosas que nos has entendido bien. ¿Cuáles son, Señor? Que orientes todo tu deseo sólo según mi voluntad y que no te ames a ti…
1.Hijo, todavía debes aprender muchas cosas que nos has entendido bien. ¿Cuáles son, Señor? Que orientes todo tu deseo sólo según mi voluntad y que no te ames a ti…
¡Qué agradable y alegre es la servidumbre de Dios con la cual el hombre se hace libre y santo de veras! ¡Qué sagrado es el estado religioso que hace al…
5. Gran honor y gloria eminente es servirte y despreciar todas las cosas por tu amor. Los que voluntariamente se sometan a su Santísima Voluntad tendrán ciertamente una gran recompensa.…
4. ¿Qué te daré yo por tantos millares de beneficios? ¡Ojalá pudiera servirte todos los días de mi vida! ¡Ojalá pudiera servirte dignamente siquiera un día solo! Verdaderamente tu eres…
3. Todas las cosas que tengo y con las cuales te sirvo son tuyas. Pero, en realidad, sucede que tú sirves más a mí que yo a ti. El cielo…
2. ¡Oh fuente de amor perenne! ¿Qué diré de ti? ¿Cómo podré olvidarme de ti que te dignaste acordarte de mí aun después de haberme yo extraviado y perecido? Más…
1.Ahora, Señor, te voy a hablar de nuevo; no callaré. Les diré a los oídos de mi Dios, de mi Señor y mi Rey, que está en lo más alto…
3. Esta es la verdad con la cual se ha de destruir toda vanagloria. Y si la gracia celestial y la caridad verdadera entraran en ti, no tendrías envidia alguna…
2. De mí sacan agua viva, como de fuente generosa, el pequeño y el grande, el pobre y el rico, y los que me sirven desinteresada y libremente recibirán gracia…
1.Hijo, si deseas ser dichoso de verdad, yo debo ser tu supremo y último fin. Con este propósito se purificará tu deseo que muchas veces se inclina torcidamente hacia sí…