Empresas Públicas de Medellín (EPM) presentó los resultados del primer estudio poblacional del Pato de Torrente (Merganetta armata) en el Oriente antioqueño, una especie poco estudiada y clave para evaluar el estado de los ríos en la región.
La investigación, realizada en conjunto con expertos de la Universidad Eafit, hace parte del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la fase de factibilidad del proyecto de abastecimiento Embalse Río Piedras. Su propósito fue conocer con mayor certeza el hábitat y las condiciones ambientales que requiere esta ave, avistada en los ríos Piedras y El Buey, en los municipios de La Ceja y La Unión.
Los resultados de la investigación permitirán diseñar estrategias de conservación para proteger a esta especie, que aunque no se encuentra en peligro de extinción, ha sido declarada patrimonio natural por los concejos municipales de La Ceja y La Unión en 2024.
Un estudio pionero en la región
El Pato de Torrente, una de las 174 especies que conforman la familia Anatidae, es conocido por su adaptación a ríos de alta velocidad en la cordillera de los Andes, desde Argentina hasta Venezuela. En Colombia, su presencia ha sido documentada en las tres cordilleras, pero su población es escasa y difícil de observar, lo que ha limitado su estudio en el país.
El análisis de EPM, con una inversión de 210 millones de pesos, se centró en evaluar la distribución espacial, la abundancia poblacional y las preferencias de hábitat de la especie en una extensión de 21 kilómetros en los municipios de La Ceja y La Unión.
Para ello, el equipo técnico realizó avistamientos durante 30 días, en dos períodos: del 19 al 31 de octubre y del 8 al 29 de noviembre de 2024. Los monitoreos abarcaron los ríos Piedras y Buey, así como la quebrada El Presidio.
Resultados y hallazgos clave
Durante la investigación, se identificaron 3 hembras, 14 machos, 24 parejas y 4 polluelos, además de rastros como excretas. A partir de estos datos y aplicando un modelo científico de ocupación, se estimó que la población de la especie en la zona es de aproximadamente 19 individuos.
Los expertos determinaron que la presencia del Pato de Torrente está estrechamente ligada a la velocidad y profundidad de los cuerpos de agua. También se encontraron individuos habitando las inmediaciones de la antigua pequeña central hidroeléctrica Río Piedras y el embalse río Buey.
Uno de los hallazgos preocupantes del estudio fue la presencia de basura y residuos de productos agroquímicos en algunos sectores, lo que podría afectar la calidad del agua y, por ende, el hábitat de la especie.
Parte de los registros obtenidos estarán disponibles en el Sistema Global de Información sobre Biodiversidad (GBIF), permitiendo que investigadores y entidades ambientales accedan a estos datos para futuros estudios.
EPM y su compromiso con la conservación
Aunque el Pato de Torrente no está catalogado como una especie en peligro, su protección ha cobrado relevancia en la región debido a su valor ecológico y cultural. Por ello, EPM ha manifestado su interés en sumarse a los esfuerzos de conservación y fortalecer la apropiación ciudadana en torno a esta ave.
En el marco de esta estrategia, la empresa realizó jornadas ambientales con las comunidades para socializar los resultados del estudio y promover acciones en favor del cuidado de los ríos.
Por otro lado, el proyecto de abastecimiento Embalse Río Piedras aún se encuentra en fase de factibilidad. Su viabilidad dependerá de los resultados del Estudio de Impacto Ambiental y otros análisis técnicos y financieros que se desarrollarán en los próximos años.
El Pato de Torrente llega a la televisión
Como parte de su estrategia de divulgación, EPM dedicará un episodio especial al Pato de Torrente en su programa “EPM va camino al barrio”, donde explorará la relación de esta especie con las comunidades de La Ceja y La Unión.
📅 Fecha: Sábado 8 de marzo
🕒 Hora: 3:00 p.m. (Telemedellín) | 6:00 p.m. (Teleantioquia)
El capítulo mostrará cómo esta ave ha sido parte de la identidad local, mientras biólogos y pobladores comparten sus experiencias sobre la presencia del Pato de Torrente en los ríos Piedras y Buey.
Con este estudio, EPM reafirma su compromiso con la biodiversidad y la sostenibilidad ambiental, demostrando que el desarrollo y la conservación pueden ir de la mano para el bienestar de las comunidades y los ecosistemas del Oriente antioqueño.
Fuente: EPM