En mayo de 2020 Cornare archivó solicitud de licencia ambiental para el proyecto denominado Pantágoras que se desarrollaría en jurisdicción de los municipios de Cocorná y El Carmen de Viboral; en ese entonces, el promotor, ANGULOA SAS, no reunió los requisitos que exige la norma para que esta entidad licenciara el proyecto.
Fue así como en octubre de 2021, el promotor del proyecto radicó de nuevo la solicitud de licenciamiento ambiental y luego del análisis y estudio por parte de un equipo especializado de Cornare, el cual tuvo en cuenta las variables de manejo ambiental, social y económico propuestas para contener los impactos que pudiese presentar el proyecto, se decidió otorgar la licencia ambiental ya que se reunieron todos los requisitos que exige la norma.
El jefe de la Oficina de Licencias Ambientales de Cornare, Oscar Martínez, expresa que “la evaluación de la información se realizó con todo el rigor técnico y jurídico, reconocemos que este tipo de proyectos generan preocupaciones en la comunidad, para lo cual desde Cornare se han venido realizando una serie de acciones que hacen más exigentes los procesos de licenciamiento de estos proyectos”.
Por su parte, el secretario general de la corporación, Oladier Ramírez Gómez, manifestó que “a pesar de que se comunicó sobre el trámite a la comunidad, a la administración y personerías municipales del área de influencia, no fue solicitada la realización de audiencia pública ambiental, pero sí hubo personas que se inscribieron como terceros intervinientes a quienes se les mantuvo informados de los avances del proceso”.
Así mismo, Oladier Ramírez invitó a toda la comunidad para que haga uso de los diferentes mecanismos de participación administrativa y judicial y se vinculen a través de veedurías o mesas ambientales para hacer seguimiento al cumplimiento de las obligaciones que debe realizar el titular de la licencia ambiental.
En el último año la corporación ha archivado cinco procesos de Licenciamiento Ambiental, ya que no cumplieron con los requisitos de ley, tres de ellos, relacionados con Pequeñas Centrales Hidroeléctricas (Cocorná III y Pantágoras, en Cocorná y Aures Bajo II en Sonsón) y dos mineros (La Chapa, en El Carmen de Viboral y Las Mercedes, en Puerto Triunfo).
Además de las cinco licencias anteriores, hace dos meses se archivó solicitud de Diagnóstico Ambiental de Alternativas para otra Pequeña Central Hidroeléctrica (Guadualito, en El Santuario). De otro lado, en decisión reciente se declaró la pérdida de fuerza ejecutoria de la PCH Alfaguaras, lo que significa que no podrá construir el proyecto que se desarrollaría en el municipio de Sonsón; esta decisión se toma ya que luego de 5 años, el promotor del proyecto no demostró que se hayan realizado actividades para la construcción y ejecución del mismo.
El Índice de Sostenibilidad Integrado limitará el desarrollo de Proyectos de generación de energía en la región, lo hará a través de una metodología innovadora, sin referente nacional e internacional
El pasado 25 de marzo fue aprobado por el Consejo Directivo de Cornare el Acuerdo Corporativo No. 424, a través del cual “se adopta la metodología para establecer el Índice de Sostenibilidad Integral para las cuencas hidrográficas en jurisdicción de Cornare”. Este Acuerdo se aplicará en la jurisdicción de Cornare y establecerá un mecanismo adicional para la toma de decisiones con el que se permitirá contrastar integralmente el impacto ambiental, social y económico de los proyectos que requieren licencia ambiental sobre toda una cuenca hidrográfica.
El Índice de Sostenibilidad Integrado es una estimación de la sostenibilidad de una cuenca hidrográfica a partir de la aplicación de indicadores sociales, ambientales y económicos, con el que se determina el estado de una cuenca.
Oladier Ramírez explica que “lo que cambiará será la forma en la cual se evalúen los proyectos que requieren licencia ambiental, los cuales generalmente estudian el área de influencia que tendrá el proyecto, pero no incorporan a la evaluación los demás impactos acumulados de los otros proyectos ni otros impactos asociados a la actividad humana. Ahora, el promotor del proyecto tendrá la obligación de tomar los impactos que realizará sobre una zona específica de la cuenca y contrastarlos con los demás impactos que hay en la cuenca, derivados de las actividades humanas, lo cual implica un mayor grado de exigencia. En ningún caso los proyectos que requieran licencia ambiental podrán afectar el Índice de sostenibilidad, por el contrario, tendrán que mejorarlo. Lo que sigue es aplicar la metodología que se realizará sobre las cuencas Samaná Norte y Samaná Sur, que son las más solicitadas para los proyectos de generación de energía”.
Fuente: Cornare