Vivimos en una época en la que el desarrollo nos permite acceder a muchos elementos que nos facilitan la vida, como por ejemplo los dispositivos electrónicos, los servicios públicos y el transporte. Todos estos avances requieren de los recursos naturales para fabricar y proveernos de todo aquello que nos brinda comodidad y tranquilidad, lo importante es asegurar que su uso sea sostenible, de manera que no afecte el equilibrio de los ecosistemas y permita la disponibilidad de los recursos en el tiempo, para que las futuras generaciones puedan también disfrutar de una vida armoniosa.
Para garantizar el uso de los servicios ecosistémicos, las autoridades ambientales como Cornare tienen un papel fundamental porque se encargan de administrar y vigilar el uso de los recursos naturales del territorio, de manera que puedan ser usados de forma sostenible en beneficio de todos.
Por esta razón, la corporación viene liderando estrategias en articulación con las comunidades para la construcción de escenarios participativos en los que todos hacen sus aportes para la aprobación conjunta de proyectos encaminados al desarrollo sostenible de la región.
“Todos los procesos son transparentes y abiertos a la comunidad, de hecho, en nuestra página web tenemos publicada la información de las 167 licencias ambientales activas que tenemos sobre minería, construcción de vías, línea de transmisión o generación de energía para que la población pueda informarse, hacer auditoría y revisiones sociales frente a cómo se están llevando a cabo los planes de manejo de estos proyectos”, explica Javier Parra Bedoya, Director General de Cornare.
Y es que actividades como la minería o la generación de energía son necesarias para el progreso de la región y desde Cornare se aseguran que estas se hagan de manera responsable con el ambiente.
Lo hacemos liderando el proceso de evaluación del estudio de impacto ambiental, que se constituye en el análisis detallado de las acciones que el proyecto desarrollaría y cuáles serían las afectaciones sobre los recursos, el paisaje y la comunidad.
Para esto, Cornare cuenta con un grupo especializado de profesionales que se encarga de definir de manera responsable y objetiva dichos impactos y obliga a controlar, mitigar y compensar las afectaciones generadas, de manera que no se pierda el equilibrio ni la disponibilidad de servicios ecosistémicos en el territorio. Asimismo, a generar estrategias sociales que beneficien a las comunidades vecinas y redunden en el desarrollo socioeconómico del territorio.
Es muy importante tomar conciencia sobre la protección de la naturaleza, es una obligación de todos unirnos para protegerla, pero también es importante saber que podemos usar sus recursos, los necesitamos para poder vivir mejor, porque la calidad de vida también es un derecho de todos. La buena noticia es que con la presencia de Cornare en el territorio habrá un equipo humano ejerciendo autoridad ambiental, asegurando el equilibrio entre el desarrollo y la sostenibilidad.
Fuente: Cornare