En el marco de la Cumbre Mundial de Sistemas Alimentarios de la Organización de Naciones Unidas, la primera dama de la Nación, María Juliana Ruiz, presentó la hoja de ruta de Colombia para la transformación de Sistemas Alimentarios Sostenibles, para el cumplimiento de la agenda 2030.
‘Colombia ha entendido el llamado de urgencia a transformar los sistemas alimentarios y la importancia de hacerlo desde el trabajo colaborativo, propositivo, articulado y solidario, para el cumplimiento de la agenda 2030 en su integralidad y con el convencimiento de un deber moral con las nuevas generaciones. Por eso nuestro compromiso en esta década de acción que aceleró el Covid-19 ya no da espera’, expresó la primera dama.
Durante su intervención, la señora María Juliana Ruiz sostuvo que esta hoja de ruta es una apuesta nacional, colectiva y visionaria, que se fundamenta en lograr que los sistemas alimentarios sean equitativos, saludables, sostenibles y resilientes.
‘Tuve el honor de ser convocante de los diálogos preparatorios a la cumbre, junto a Lina Arbeláez, directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Llevamos a cabo seis diálogos multisectoriales en los que pudimos identificar retos, plantear acciones concretas y reconfigurar lo que se debe mejorar, bajo el marco de las cinco vías de acción propuestas. Además, en este proceso, firmamos la coalición para la alimentación escolar’, afirmó.
En ese sentido, afirmó que hay temas en los que el país trabaja como la Gran Alianza por la Nutrición, la disminución de las muertes por y asociadas a la desnutrición; la práctica de la lactancia materna; el fortalecimiento de las cadenas de valor locales y los circuitos de comercialización y la protección del campo como patrimonio cultural y agroalimentario.
Asimismo, expuso los retos en los que sigue trabajando el país, como el derecho humano a la alimentación adecuada y la perspectiva diferencial y territorial; la implementación de la ley de compras públicas locales y la política nacional de pérdidas y desperdicios de alimentos; así como el fortalecimiento de la alimentación escolar y de los instrumentos sobre agricultura campesina, familiar y comunitaria.
De igual manera, destacó la importancia de la cumbre para reafirmar el compromiso con la transformación de los sistemas alimentarios, actuar con corresponsabilidad e involucrar a la juventud en este propósito de velar por la seguridad alimentaria de los países.
‘La cumbre es una puerta para potenciar el cumplimiento de nuestra hoja de ruta. El camino para hacerla realidad requiere un compromiso de todos, donde actuemos con corresponsabilidad, poniendo un foco especial en el liderazgo intergeneracional, apropiando en los jóvenes la sabiduría ancestral y conjugándola con su ímpetu innovador, para que sean ellos los grandes agentes de cambio y protagonistas de la transformación de nuestros sistemas alimentarios, acelerando el cumplimiento de la Agenda 2030’, concluyó.
La sesión contó con la participación de Mariam Chabi Talata, vicepresidenta de la República de Benín; Isatou Touray, vicepresidenta de la República de Gambia; Xavier Bettel, primer ministro de Luxemburgo; Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea, Unión Europea, y Lotay Tshering, primer ministro del Reino de Bután, entre otros.